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Robert de Orléans, duque de Chartres

Robert de Orleans, duque de Chartres.

Roberto de Orleans (París, 9 de noviembre de 1840 - Eu, 5 de diciembre de 1910) fue un príncipe francés de nacimiento, II duque de Chartres y convertido en Duque de Orleans y Conde de París tras la abdicación de los derechos al trono de su hermano Felipe, con lo que se convirtió en el segundo pretendiente orleanista al trono de Francia.

Biografía[]

Phillipe Robert Louis Eugene Ferdinand d'Orléans nació el 9 de noviembre de 1840 en París, siendo el segundo y último de los dos hijos habidos entre los entonces príncipes herederos de Francia: Fernando Felipe, duque de Orleans y de Chartres, y la princesa alemana Elena de Mecklemburgo-Schwerin. Tuvo un hermano mayor, Felipe, nacido en 1838. Su padre murió en 1842, por lo que Roberto heredó el título de Duque de Chartres, y su hermano se convirtió en el heredero de la Corona con apenas cuatro años de edad. Sin embargo, solo seis años más tarde una revuelta popular depondría al rey Luis Felipe I y aboliría una vez más la monarquía francesa.

Aunque en los días posteriores a la abdicación de su abuelo hubo intentos de colocar a Felipe en el trono bajo la regencia de su madre, el plan no fructificó, por lo que sus partidarios desistieron y la Familia Real abandonó el país para exiliarse en Inglaterra, mientras se proclamaba la Segunda República Francesa.

Exilio[]

La familia real se exilia entonces en el Reino Unido, estableciéndose en Claremont House, una residencia al sur de Inglaterra que era propiedad del rey Leopoldo I de Bélgica, yerno de los depuestos reyes por su matrimonio con la princesa Luisa María de Orleans. Por su parte, y herida por el comportamiento que habían tenido sus suegros durante los últimos días de la Revolución, la Princesa de Mecklemburgo-Schwerin decide irse a vivir con sus dos hijos en el ducado alemán de Sajonia-Weimar-Eisenach.

Al mismo tiempo, la situación financiera de los Orleans es cada vez más precaria, pues el nuevo Gobierno republicano francés había confiscado todas las propiedades y cuentas de la depuesta Familia Real, y pese al alejamiento, la Princesa dependía totalmente de ellos. Dos años más tarde Elena se reconcilió con sus suegros, y junto al Conde de París y el Duque de Chartres, comenzaron a visitar Inglaterra regularmente desde 1850.

Viaje a Quebec[]

En abril de 1851 le ofrecieron la corona de Quebec a su hermano Felipe, misma que aceptó cinco meses más trade junto a su madre, que sería la Regente hasta que cumpliera la mayoría de edad. Para hacerlo, el futuro Rey quebequés debió renunciar a sus derechos al trono francés en favor de Roberto, que como su hermano menor se mudaría también a Quebec de todas formas.

Felipe, Roberto y su madre se embarcaron con rumbo a América el 16 de mayo de 1852, llegando a Quebec el 11 de junio y estableciéndose en la Maison de la Citadelle, una antigua barraca construida en 1830 por el ejército británico dentro de la fortaleza llamada Ciudadela de Quebec, y elegantemente adecuada para la llegada de la familia real.

El 14 de junio, tres días después de su llegada al país, el Parlamento Quebequense procedió a tomar juramento al adolescente Felipe y a su madre, nombrándolos Rey y Regente respectivamente. La ceremonia de coronación tendría lugar diez días más tarde, el 24 de junio, en la Catedral de Notre-Dame de Quebec.

El legislativo le asignó a la nueva familia real el territorio usufructuario de la Isla del Cabo Bretón en la provincia de Nueva Escocia, y respetando otra de las condiciones impuestas por el Gobierno británico para apoyar la monarquía, tomaron ese nombre para renombrar su dinastía como Casa de Breton, ya que además el topónimo estaba relacionado con el territorio francés de Bretaña.

En 1854 el Gobierno quebequense asignó una partida para la construcción de una residencia más acorde al rango de la familia, construyendo el Palacio de Montcalm en el centro de la ciudad de Quebec-ville, donde la Princesa regente ofrecía grandes y lujosas fiestas al mejor estilo francés, convirtiéndose en el centro de la alta sociedad del país. Además, allí crecerían Roberto y el joven Rey.

Matrimonio y descendencia[]

El 11 de junio de 1863 contrajo matrimonio en la ciudad de Quebec con su prima carnal, la princesa Francisca de Orleans, quien era hija de su tío Francisco, príncipe de Joinville y la princesa brasileña Francisca de Braganza. Establecidos en la Maison de la Citadelle, los Duques de Orleans tuvieron cinco hijos:

Regreso a Francia[]

Desde muy temprana edad, la vida del príncipe se había colocado bajo el signo del exilio, y todo indica que continuaría así por mucho tiempo. Sin embargo, en 1870 el Segundo Imperio francés se derrumbó y la ley de exilio que afectaba a los Orleans fue suprimida el 8 de junio 1871. Roberto decidió entonces abandonar Quebec y dirigirse a Francia junto a su esposa Francisca y los cuatro hijos que tenían hasta entonces.

A su llegada tomó posesión del Castillos de Eu, una propiedad familiar que había sido confiscada en 1848. Mantuvo el conflicto de su padre por la legitimidad de su línea hereditaria y la de los carlistas españoles, a quienes se les excluía por la abdicación hecha por Felipe V de España sobre sus derechos en Francia.

En 1874 llegó al mundo su cuarto y último hijo, Juan, que debido a su condición del único nacido en suelo francés, se convirtió en la mejor opción para convertirse en el heredero de los derechos dinásticos de la rama de pretendientes orleanistas por sobre sus hermanos mayores, que al ser quebequeses podrían ser desligitimados con mayor facilidad.

En 1886 se expidió una nueva ley de exilio que obligó al Conde de París a abandonar Francia nuevamente, escogiendo esta vez para establecerse a la cercana ciudad inglesa de Londres. Apenas pudo regresar a su Patria, en 1898 se instaló una vez más en el Castillo de Eu, donde pasaría sus últimos años de vida, antes de fallecer el 5 de diciembre de 1910, a la edad de setenta años.

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